martes, 10 de enero de 2012

El camino al Paraíso o al Fuego del Infierno


¡Oh, creyentes! Temed a Alá, y que cada alma considere cuánto ha realizado para [el Juicio de] mañana.... (59:18)

La Tumba (Qabr): Se trata de la primera etapa del más allá: Un hoyo para el hipócrita e incrédulo, un jardín para el creyente. Existen narraciones acerca del tormento en la tumba por distintos actos de desobediencia. Algunos de ellos son: No limpiar la orina, difamar para provocar rivalidad, dormir en lugar de realizar las oraciones obligatorias, abandonar la recitación del Corán, fornicación y adulterio, homosexualidad, interés y usura, no pagar las deudas y otros pecados. La salvación para este castigo es realizar buenas acciones sinceramente buscando la complacencia de Allah, buscar en Él el refugio para este castigo, recitando Surat-al-Mulk (67), y otras acciones.

La trompeta de la Resurrección (An-Nafj fis-Sur): Se trata de una enorme trompeta que está a los labios del Arcángel Israfil quien espera la orden de soplarla. Allah, Alabado sea, dijo: ‘El día que se sople la trompeta se aterrorizarán todos aquellos que estén en los cielos y en la Tierra, salvo quienes Alá proteja, y todos se presentarán sumisos ante Él.‛ (27:87), tras ello todo será destruido. Luego de cuarenta años, sonará de nuevo, dijo Allah, Alabado sea: ‘… luego ser {soplada por segunda vez y [todos resucitarán] poniéndose de pie [para ser juzgados]. Entonces verán [lo que Allah hará con ellos].‛ (39:68)

La Resurrección (Ba’az): Allah enviará una lluvia torrencial y los cuerpos se renacerán en una nueva creación, una creación de la que nadie morirá jamás. Resucitarán incircuncisos y desnudos. Verán a los ángeles y los genios.

La Gran Reunión (Hashr): Allah congregará a las criaturas para que rindan cuentas y se agitarán con gran temor como ebrios, en un día colosal que durará cincuenta mil años. El sol estará muy cerca y transpirarán según sus acciones. Los tiranos y los débiles que los siguieron pelearán entre sí. Cada incrédulo peleará con su demonio y con Satán e incluso con sus propias extremidades que los delatarán, y todos se maldecirán. Los injustos malhechores se morderán las manos (en remordimiento). Setenta mil ángeles arrastrarán ante ellos el Fuego del Infierno. Cuando los incrédulos vean el Fuego del Infierno, desearán poder salvarse del castigo o ser transformados en polvo (para escapar de la inminente tortura). Los desobedientes serán castigados. Por ejemplo, el que se negó a pagar la caridad obligatoria (Zakat) verá cómo el dinero que se negó a pagar lo quemará como barras de hierro fundido. Los arrogantes resucitarán como hormigas (para pisarles encima). El traidor, embustero y ladrón será expuesto. El ratero tendrá que vérselas con lo que robó. En pocas palabras, todo lo oculto será expuesto a la luz. En cuanto a los correctos, este día no los asustará y pasará rápidamente.

Intercesión (Shafaa’ah): La gran intercesión por todas las criaturas es en especial para el Profeta Muhammad (saw) en la cual él intercederá para la eliminación de la gran tribulación de toda la humanidad y para que comience la rendición de cuentas (luego habrá otra intercesión menor).

Rendición de cuentas (Hisaab): La gente será presentada ante su Señor en grupos para que sus acciones sean vistas y cuestionadas. También se les cuestionarán sus vidas, su juventud, su riqueza, su conocimiento y sus responsabilidades, las bendiciones recibidas, las facultades de ver, oír y la inteligencia (y cómo fue utilizada cada una). Los incrédulos e hipócritas deberán rendir cuentas delante de toda la creación para aumentar el rechazo contra ellos, probar su culpa y que los testigos hablen contra ellos, incluyendo la gente, la tierra, los días, las noches, la riqueza, los ángeles y sus propias extremidades. Admitirán y reconocerán sus pecados. Se les dará a todos los incrédulos una sesión privada en la que admitirán ante Allah sus pecados hasta que, cuando piensen que serán destruidos, se les dirá: ‘Los oculté de ellos en el mundo y los perdono hoy’. Los primeros en rendir cuentas serán los seguidores de Muhammad saw. Los primeros actos de adoración a tener en cuenta serán las oraciones obligatorias. Las primeras disputas serán las que involucren derramamiento de sangre.

La exposición de los Rollos que registran las Acciones (Tataa’ir as-Suhuf): Luego se abrirán los rollos con las acciones de cada persona. Y serán registros ‚en los que no se omite ninguna acción, por más grande o pequeña que sea. Se le dará al creyente el registro en su mano derecha mientras que a los incrédulos e hipócritas se les dará el suyo en la mano izquierda por detrás de sus espaldas.

La Balanza (Mizan): Las acciones se pesarán en una balanza de tal manera que todos reciban su recompensa de manera acorde. Esta balanza es un instrumento real de medida en la que se pesarán las acciones realizadas sinceramente por Allah y según la Ley del Islam. Algunas de las acciones que tendrán un peso mayor son decir LA ILAAHA ILLALLAH (nada merece ser adorado salvo Allah), el buen carácter, el recuerdo de Allah como decir ‘al-Hamdu lillah’ (todas las alabanzas pertenecen a Allah), decir ‘Subhaan-Allahi wa bi hamdih (Glorificado y alabado sea Allah) y decir ‘Subhaan-Allahil-‘Azim (Glorificado sea Alá el Magnífico). Las personas intercambiarán sus buenas y malas acciones buscando corregir los errores e injusticias cometidos y pagar compensación unos a otros.

El Estanque (Hawdh): Los creyentes llegarán a un estanque. Todo aquel que beba de él jamás sufrirá sed nuevamente. Para cada Profeta existe un estanque especial y el mayor pertenece al Profeta Muhammad saw: Su agua es más pura que la leche, más dulce que la miel, más sabrosa y aromática que el almizcle; sus vasijas son de oro y plata, cuyo número es igual al número de estrellas en el cielo; su longitud equivale a la distancia de Jerusalén a Adén, en el Yemen. El agua de este estanque surge de un río del Paraíso llamado ‚al-Kauzar‛.

La Prueba de los Creyentes (Imtihaan-al-Mu’minin): Al final del Día de la Reunión, los incrédulos irán tras los dioses e ídolos que solían adorar quienes los conducirán al Fuego del Infierno en grupos como rebaños de ovejas, ya sea caminando o arrastrados sobre sus rostros. Luego, sólo los creyentes y los hipócritas (que simulan ser creyentes) quedarán esperando, y Allah se acercará a ellos y les preguntará: ¿Qué están esperando? Ellos dirán: ‘Estamos esperando a nuestro Señor‛. Él se les revelará en persona exponiéndoles Su pierna (as-Saaq – la señal prometida) tras la cual caerán todos en prosternación excepto los hipócritas, tal como Allah dijo de ellos: ‘El día que [se ponga de manifiesto la gravedad de la situación y] descubra Su pierna divina [y nada de la creación se asemeja a Allah] y sean invitados a prosternarse pero no podrán…‛. Entonces verán el Camino (Siraat) que cruza sobre el Fuego del Infierno, y Allah les dará a los creyentes sus luces y apagará las de los hipócritas

El Camino (Siraat): Se trata de un puente tendido sobre el Fuego del Infierno sobre el cual deben pasar los creyentes para llegar al Paraíso. El Profeta saw lo describió como: ‘…confunde, se pierde el paso y se tropieza. En él hay abrazaderas y ganchos como gigantes espinas… Es más angosto que un cabello y más afilado que una espada…‛ (Muslim). Los creyentes recibirán su luz según sus acciones, la mayor tendrá el tamaño de una montaña y la menor, tan pequeña como la punta de un dedo. Dicha luz iluminará su camino y pasarán por el Camino según sus acciones, estará el creyente que pase en un abrir y cerrar de ojos, como un relámpago, o como el viento, un ave, un caballo veloz, un jinete, o caminando y arrastrándose… y algunos llegarán sanos y salvos mientras otros lo harán dañados por los ganchos, y otros caerán al fuego del infierno. (al-Bujari y Muslim). Los hipócritas no tendrán luz y regresarán, pero se levantará un muro entre ellos y los creyentes, y aunque deseen cruzar con seguridad el puente, caerán al Fuego del Infierno.

El Fuego del Infierno (An-Naar): Los incrédulos, los hipócritas y algunos de los creyentes desobedientes entrarán al Fuego del Infierno. De cada 1.000 personas, 999 entrarán al Fuego del Infierno. El mismo tiene siete puertas. El calor del Infierno es setenta veces más severo que el fuego de este mundo. El cuerpo del incrédulo será más grande, para sentir más el tormento: El espacio entre sus hombros será como de un viaje de tres días y el tamaño de su molar será como la montaña de Uhud. Su piel será gruesa y será cambiada una y otra vez después de ser quemada para así aumentar el dolor del calcinante castigo. Beberá agua hirviendo que le quemará el estómago. Su alimento será el Zaqqum, el cual es excesivamente amargo, además de las supuraciones y líquidos de las heridas de los habitantes del Infierno. Los menos castigados llevarán dos brasas ardientes en las plantas de los pies que le harán hervir el cerebro. En el Fuego del Infierno, sus pieles arderán y se derretirán, y será arrancada y se usarán cadenas y trabas. El pozo menos profundo tarda setenta años en que un cuerpo caiga a su fondo. El combustible del Fuego del Infierno consiste de los incrédulos y las rocas (ídolos), su viento es veneno, su sombra es un calor atroz, y sus ropas son de fuego. Devorará todo y no dejará nada. Aullará y gemirá grotescamente para quemar las pieles externas y llegar hasta los huesos y profundidades de la mente.

La Frontera (Qantarah): El Profeta saw dijo: ‘Los creyentes se salvarán eventualmente del Fuego del Infierno y llegarán a una frontera (Qantarah) entre el Paraíso y el Fuego del Infierno y allí se compensarán unos a otros por las injusticias y crímenes cometidos en este mundo. Una vez que estén ajusticiados (ojo por ojo, etc.) y purificados, podrán entrar al paraíso. Por quien en cuya mano está el alma de Muhammad, uno de ustedes conocerá su lugar de residencia en el Paraíso mejor que su lugar de residencia en este mundo‛. Al-Bujari.

El Paraíso (Yannah): El Paraíso es la morada final de los creyentes. Los bloques con los que está construido son de oro y plata y la argamasa es de almizcle. Sus rocas son perlas y el polvo es azafrán. Tiene ocho puertas y cada una se abre en la amplitud de un viaje de tres días, y aún entonces es abrumador entrar por ellas. Tiene cien grados entre cada nivel y el que sigue, similar a la distancia entre el cielo y la tierra. El ‘Firdaus’ es la parte más alta y desde allí fluyen los ríos del Paraíso. El techo del Paraíso es el Trono de Alá, el Más Clemente y Misericordioso. Sus ríos son de miel, leche, vino y agua, y fluyen sin canales y los creyentes podrán hacerlos fluir a su antojo. Los frutos del Paraíso son permanentes, al alcance de todos en todo momento. En él hay tiendas de perlas talladas y cada una de cien kilómetros de ancho. Los hombres crecerán, pero jóvenes y sin barba. Su juventud nunca desaparecerá y su ropa nunca se ajará. No orinarán, defecarán ni emitirán ningún tipo de impureza. Sus peines serán de oro y su transpiración como almizcle. Las mujeres del Paraíso serán bellas vírgenes de edades similares a las de sus compañeros. El primero en entrar al Paraíso será Muhammad saw y luego los otros Profetas. El más bajo de los habitantes del Paraíso deseará y se le dará lo que desea multiplicado diez veces. Sus siervos son jóvenes eternos como perlas atesoradas. Pero el gozo más grande del Paraíso será ver al Señor, Alabado sea, y a su morada de eternidad en el Paraíso.

lunes, 9 de enero de 2012

DIEZ HADICES


1.- Los cinco pilares de Islam.
Islam es una religión donde el creyente ha de observar las cinco practicas que son obligatorias para todos los que se dicen musulmanes y que se refieren a todos los momentos de la vida, con frecuencias que varían desde una ocasión única como es la profesión de fe o Shahada, o la Peregrinación a Meca, que solo es obligatoria si se disponen de medios para realizarla, hasta la practica de la oración cinco veces al día, el ayuno anual o el pago del impuesto. Cada una de estas obligaciones nos pone en contacto con un aspecto de la vida individual y de la vida de la comunidad y su objetivo es establecer un método de disciplina e higiene, tanto espiritual como corporal.
“Ibn Omar relató que el Profeta dijo: El Islam se basa en cinco cosas: Testificar que no hay Dios excepto Aláh y que Muhammad es el mensajero de Aláh (Shajada); Establecer las cinco oraciones (Salat); Realizar el ayuno en el mes de Ramadán (Sawn); Pagar el impuesto anual sobre la riqueza acumulada (Saqat) y realizar la peregrinación a la Meca (Hach)”. Transmitido por Bujari y Muslim.

2.- Las tres dimensiones de la creencia: Islam, Imán e Ijsan.
Nuestra creencia aporta a los musulmanes el desarrollo de tres dimensiones que completan todos los aspectos del desarrollo humano en la vía espiritual: el Islam como religión y jurisprudencia aporta sus ritos exteriores que sirven para identificar a al comunidad o Umma, y unirla en sus practicas, El Imán, que es la provisión de fe individual que sostiene la creencia es la ciencia de la unidad, la cual comprende el análisis y la discusión sobre la creencia en las raíces de la religión, e Ijsan que es el conocimiento de los misterios espirituales comprende la ciencia del Tasawuf, o los aspectos secretos e interiores de Islam.
Para explicar estas tres dimensiones y su significado, contamos con un relato precioso que nos trasmitió Muslim, según un relato de uno de los Califas iniciales de Islam, Omar Bin al Jatab, testigo de una experiencia directa con el transmisor del Corán, el ángel Gabriel.
“Omar ibn Jatab relató: Un día cuando estábamos sentados con el Profeta, apareció ante nosotros un hombre con ropa muy blanca y con cabello muy negro. Ningún rastro de viaje era visible en él y nadie de nosotros lo reconoció.
Se sentó a un lado del Profeta diciéndole:
-Dime, Muhammad sobre el Islam.
-El Profeta respondió: el Islam significa que debes atestiguar que no hay Dios excepto Alá y Muhammad (La paz sobre él) es el mensajero de Alá, establecer la oración (salat) diariamente, pagar el impuesto (zaqat), ayunar durante Ramadán (sawn) y realizar la Peregrinación a la Meca (Hach), si estás en posibilidad de hacerlo.
-El hombre le dijo: Has hablado con la verdad. Nos quedamos atónito ante la osadía de preguntar al Profeta y después declarara que había hablado con la verdad.
-El forastero después dijo: háblame acerca del Imán.
-El Profeta dijo: Significa que debes creer en Alá, Sus ángeles, Sus libros, Sus mensajeros, en el Último Día y creer en el decreto del bien y el mal.
-El hombre repitió: has hablado con la verdad.
-A continuación dijo: ahora infórmame del Ijsan.
-El Profeta contestó: significa que debes adorar a Alá como si le vieras aunque tú no lo veas, siendo que Él te observa. El extraño después se retiró y tras un instante,
-El Profeta me preguntó: ¿Acaso sabes quién era el que me preguntó?
-Yo contesté: Alá y Su mensajero lo saben mejor. -El Profeta dijo: era el ángel Gabriel, quien llegó a enseñaros vuestro dín (religión)”. Transmitido por Muslim

3.- Sobre la proximidad del Dios.
Islam se presenta al creyente como una opción libre a la que deberá prestar su consentimiento y dedicación cada día, en cada acto. Cada una de estas opciones libres del creyente recibe una respuesta inmediata del Dios que asegura nuestra conexión interna entre voluntad y espiritualidad.
De esta manera, el creyente no tiene una concepción de un Dios lejano y extraño a su propia interioridad. En el siguiente Jadiz que transcribo se presenta una relación interactiva entre el creyente y el Dios que embarga de dulzura a los practicantes y de esperanza a los angustiados, es una dimensión de intimidad y de atención personalizada, muy gratificante para la soledad que nos depara la sociedad individualista actual.
“Yo estoy con mi siervo cuando piensa en Mi
Yo estoy junto a él cuando Me recuerda
Si me recuerda en su corazón,
Yo Me acuerdo de él en Mi corazón.
Si hace mención de Mi en una reunión
Yo hago mención de él en una reunión mejor que esa.
Si se aproxima a Mi un palmo,
Yo me aproximo a él un codo
Y si se aproxima a Mi un codo
Yo me aproximo a él una braza.
Si viene hacia Mi andando
Yo me apresuro hacia él corriendo.”
Hadiz Qudsi. Transmitido por Bujari.

4. Sobre la Clemencia del Dios que ha tomado como su nombre El más Clemente, y el más Misericordioso.
Los musulmanes sentimos al Dios esencialmente como el perdonador de nuestras faltas, el Clemente con nuestros múltiples fallos y errores. De hecho se le nombra con 99 nombres que son Sus atributos pero los dos atributos que Ha elegido para que siempre le nombremos por ellos, son relativos a su Misericordia y a su Clemencia.
El siguiente Hadiz muestra la ternura del Dios con el creyente, con los defectos y las equivocaciones diarias de estos, y Su disposición permanente al perdón.
Abi Musa Al Ash’ari cuenta que el Profeta, la paz y las bendiciones sobre él, dijo:
“Alláh mantiene Su mano extendida durante la noche para que aquel que haya contravenido alguna enseñanza del Islam durante el día pueda enmendarlo reorientando su ser hacia Aláh, y mantiene Su mano extendida durante el día para que aquel que haya contravenido alguna enseñanza del Islam durante la noche pueda enmendarlo reorientando su ser hacia Aláh, hasta el día en que el sol salga por el oeste”. Transmitido por Muslim

5.- Sobre la solidaridad y cooperación entre los miembros de la Comunidad de creyentes.
Todos los que se reconocen como creyentes musulmanes, por su aceptación de Islam, están unidos por lazos internos y externos, formando una Comunidad mundial o Umma, que se reconoce como tal y que tiene un efecto de identidad, de solidaridad y de cooperación mutua entre sus miembros. La fuerza de cohesión interna y externa son el fundamento de este grupo humano, y los actos exteriores que refuerzan los lazos de unión entre sus componentes son uno de los elementos característicos de Islam.

Por eso el Profeta Muhammad, sea bendecido, estableció practicas y transmitió recomendaciones dirigidas a lograr la máxima unión entre los miembros de la comunidad.
Entre los abundantes Hadices se ha seleccionado el siguiente por sus notas simples y fundamentales que describe a la Comunidad como una unidad orgánica e interdependiente.
Al Nu’man ibn Bashir cuenta que el Profeta, la paz y las bendiciones sobre él dijo:
“Los creyentes, en su amor, amabilidad y compasión mutuos, son como el cuerpo humano: cuando una de sus extremidades está enferma, todo él vela y sufre calentura”. Transmitido por Bujari y Muslim

6.- Sobre la trascendencia de la intención.
Los creyentes están vinculados en sus méritos y en sus errores a la intención con que realizan sus actos. Es la intención interna del creyente lo que transciende en su contrato con Allah. Esa intención es lo que permanece en su balance, y lo que se examinará El día de las Cuentas. Por ello se dice en el Corán: “Allah es el que crea el ser y el que crea las acciones”. Pero es responsable directo de la justicia o injusticia consigo mismo, ya que el contrato del creyente tiene por objeto su involucración personal y directa en su autoconocimiento y auto desarrollo en la vía espiritual.
Abu Huraira relató que el Profeta, la Paz y las bendiciones con él, le dijo:
"Realmente Allah no mira ni vuestro cuerpo ni vuestra imagen sino que mira vuestros corazones." Transmitido por Muslim

7. Sobre la condición de la veracidad.
En concordancia con la primacía de la intención nos encontramos con la necesidad de excluir el autoengaño, que es el mayor obstáculo para que nos auto conozcamos y podamos alcanzar el progreso que nos debemos a nosotros mismos. Por esta razón, al mal se le identifica como “El engañador”. Uno de los instrumentos que se nos transmite como de mayor utilidad es alcanzar la certeza de la rectitud y veracidad de nuestros actos, puesto que la duda nos lleva necesariamente a la desconfianza y a la paralización.
Abu Muhammad Al Hasan Inb Ali Inb Abu Talib dijo :
"He aprendido del Mensajero de Allah, Él le bendiga y le de paz, su dicho: Deja aquello que te hace dudar de su licitud y encamínate a lo que no te hace dudar. Pues la verdad realmente es tranquilidad, sosiego y paz interna; y la mentira, duda." Jadiz Sahih, Transmitido por Tirmidi

8.- Sobre la libertad de los creyentes.
El creyente que establece un contrato espiritual con Allah, basado en una opción libre. Precisamente esta libertad es la que fundamenta en su base su responsabilidad. Por ello el Corán advierte : “No hay coacción en el Dín”. De esta forma se establece que los creyentes libres son los plenamente responsables de sus opciones, mientras los que están privados de libertad no lo son. De las opciones que toma el creyente se deriva el merito o el demérito de sus acciones, antes que de sus actitudes y del resultado de las mismas que permanece en las manos de Allah.
Al Hariz Inb Asim Al Ashari, relató que el Profeta, sobre él la paz, dijo:
"La purificación es la mitad del imán y la expresión de agradecimiento ‘al hamdulillah’ llena la balanza; y las expresiones de ‘subhanallah’ y ‘al hamdulillah’, llenan lo que hay entre los cielos y la tierra; la oración es luz; y la sádaqa una prueba de la fe del que la da; y en la paciencia los asuntos se ven más claros; y el Corán será una prueba a favor o en contra; y cada uno comienza el día como vendedor de sí mismo, liberándose o condenándose." Transmitido por Muslim.

9. Sobre los beneficios de la paciencia.
El conocimiento limitado de las causas y los efectos de los sucesos obliga al creyente a no aferrarse a sus expectativas que frecuentemente son infundadas y erróneas. Por ello, el desapego a las expectativas, y el hecho de hacer positivas las situaciones aparentemente desfavorables es un instrumento precioso para el creyente, que aprende a confiar en que lo que percibe como dificultad puede ser sólo la puerta para la facilidad futura.
Abu Yahia Suhaib Ibn Sinan, relató que el Profeta, la paz y las bendiciones sobre él le dijo:
"¡Es admirable el caso del creyente!, porque todo asunto encierra un bien para él y esto no ocurre con otro que no sea creyente. Pues, si le llega la facilidad y es agradecido con Allah, hay un bien para él. Y si tiene paciencia ante la dificultad, también consigue un bien para él." Transmitido por Muslim

10.- Sobre la ternura y su condición entre los musulmanes.
La expresión de los sentimientos que nos causan las desgracias de los infortunados es señal del estado de salud de nuestro corazón y la capacidad para colocarse en el lugar de los que sufren una consecuencia necesaria de la solidaridad que debería enlazar todos los corazones de los creyentes que forman la Umma. Por ello la Compasión esta considerada como el atributo que el Altísimo ha elegido para denominarse en todas las invocaciones que abren el Corán. Sin ella, y sin la ternura no se puede progresar espiritualmente ni pretender pertenecer a la verdadera Comunidad de creyentes.
Abu Zaid Usama Ibn Zaid Ibn Hariza, relato:
"Una hija del Profeta, Allah le bendiga y le de paz, envió un emisario para que le comunicara que un hijo suyo estaba a punto de agonizar. Y una vez enterado de la noticia, mandó saludos a su hija y le dijo que tuviera paciencia y resignación, ya que de Allah es tanto lo que toma como lo que da y para todos ha decretado un plazo. Insistió su hija y mandó de nuevo al emisario para que viniera a verla el Mensajero de Allah, que Él le bendiga y le de paz. Así pues, se puso en marcha y con él Saad Ibn Ubada, Muad Ibn Yabal, Ubai Ibn Kaab, Zaid Ibn Zabit y otros, que Allah esté complacido con todos ellos. Al llegar le llevaron al niño, lo tomó en su regazo y sintió cómo su respiración se agitaba y palpitaba su corazón. Después los ojos del Profeta, Allah le bendiga y le de paz, derramaron lágrimas, echándose a llorar.

Y le dijo Saad: ¿Oh Mensajero de Allah, qué es esto?

Le contestó: ‘Esto es compasión y ternura que Allah ha puesto en el corazón de sus siervos. Y Allah se compadece de aquellos que tienen compasión’." Transmitido por Bujari y Muslim.

sábado, 7 de enero de 2012

¿Cuál es la diferencia entre los Jinns y Shaitan?


"Los genios" son una clase, son el segundo tipo de creación, junto con el hombre. Allah el Glorificado, dijo:
Y yo (Allah) he creado a los genios y a los hombres sino para que me adoren (Sólo a Allah). [Adh Dhariyaat: 56]
Los Shayatines son los rebeldes de entre ellos.
Así que los Shayatines son de los genios, así como la humanidad, a la vez que los Shayatines, los genios y la humanidad se incluyen dentro de la categoría de Shayatin, Allah el Elevado dijo:
Y así hemos nombrado a todos los enemigos del Profeta - Shayatin (demonios) de entre los hombres y los genios, inspirando a otros con el discurso adornado como un engaño (o por medio de engaño). [al An'aam: 112]
El punto es que el Shayatin (Demonio) vienen de los Jinns (genios), así como la humanidad, son los rebeldes, los que más transgredieron los límites de Allah.
Así que los genios son una clase entre la creación, creado por Allah a adorarlo como la humanidad.
"El Shaytán", que es el antepasado de los genios, es su líder, y quien se rebeló a su progenitor y violó los límites, ese es un Shaytán. Aquellos de entre ellos, que son firmes en la adoración a Allah no son del Shaytán, sino que son Creyentes, como Allah dijo respecto a los Jinns-genios:
"Hay entre nosotros, los que son justos, y los que por el contrario, son grupos que tienen diferentes formas (sectas religiosas). [Al jinn: 11]
También se dice de ellos:
"Y algunos de entre nosotros son musulmanes (que se han presentado a Allah, después de escuchar el Corán), y algunos de nosotros son de Al-Qaasitun (incrédulos que se desviaron del camino recto). Y todo aquel que ha abrazado el Islam (es decir, se ha convertido en un musulmán mediante la presentación de Allah), entonces han buscado el camino correcto." Y en cuanto a los Qaasitun ( incrédulos que se desviaron del camino recto), serán combustible para el Fuego [Al Jinn : 14-15]

viernes, 6 de enero de 2012

Tres personas despreciadas por Yibril


Ka'b Ibn ‘Uyrah (radialláhu 'anhu) narró que Rasülulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam) dijo: "Acérquense al mímbar". Nos acercamos, y cuando ascendió el primer peldaño del mímbar dijo Ámin". Cuando ascendió el segundo peldaño dijo "Ámin". Cuando ascendió el tercer peldaño dijo "Ámin". Cuando descendió dijimos: "¡Oh Rasúlulláh!, mientras subías al mímbar, te hemos escuchado hoy, algo que jamás habíamos escuchado antes". Él (sallalláhu 'aleihi wa sallam) dijo: "Cuando ascendí el primer peldaño, Yibril ('aleihis salám) apareció ante mí y dijo: "¡Ay de aquél! que encuentre el bendito mes de Ramadán y lo deje pasar sin lograr el perdón", a lo que dije Ámin. Cuando ascendí el segundo peldaño, él ('aleihis salám) dijo: "¡Ay de aquél! ante quien tu nombre es mencionado y no te envíe saludos y pida bendiciones para ti (salawát 'alan-Nabi)". Respondí Amin. Cuando ascendí el tercer peldaño, él dijo: "¡Sean destruidos aquellos, cuyos padres, o uno de sus padres se vuelvan viejos en su presencia, y no pueda entrar al Yannah! (por no servirlos)". Yo dije Ámin". (Hákim).
 Comentario
En este hadith, Yibril ('aleihis salám) pronunció tres desgracias a las cuales Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam) respondió con "Ámin". Primero, ni más ni menos, que la condena de Yibril ('aleihis salám) que es un ángel muy cercano y luego la reprobación de Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam), sirven para dejar en claro la severidad de este asunto.
¡Quiera Alláh, por Su Bondad concedernos el taufiq de apartarnos de estos tres males y protegernos! porque de lo contrario, sin duda estaremos en la perdición. En Ad-Durrul Manthúr se dice que Yibril ('aleihis salám) ordenó a Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam) que dijera "Ámin". Siendo un ángel del estatus de Yibril ('aleihis salám) quien da la instrucción a Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam) de decir "Ámin" después de cada desgracia.
 La primera persona que se menciona en este hadith es aquel individuo que, encontrándose dentro del mes de Ramadán, desperdicia su tiempo cometiendo pecados, dejando de lado sus deberes religiosos y, por ello, pierde la posibilidad de obtener el perdón. Ramadán es el mes de la Misericordia de Alláh Ta'álá y si es desaprovechado por causa de la maldad y la negligencia ¿Cómo podría entonces alguien ser perdonado? Si no alcanza la complacencia de Alláh durante Ramadán ¿Entonces, cuándo podría hacerlo? No cabe duda acerca de su fracaso, más aún cuando es precisamente en Ramadán donde se encuentran numerosas oportunidades de obtener el perdón.
 El segundo desdichado, es aquel que escucha mencionar el nombre de Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam) y no recita su salutación.
 Este hecho ha sido mencionado en otros ahádith; por ello los 'ulamá, consideran que es wáyib (obligatorio) el recitar las salutaciones cada vez que se escucha el nombre del Profeta Muhammad (sallalláhu 'aleihi wa sallam). Además de esta condenación, se han hecho varias advertencias, al respecto, en varios ahádith se ha llamado a quienes no cumplen con esta obligación los desafortunados o los tacaños.
 En otras partes, tales personas han sido consideradas como desertores; como quienes han perdido su camino al Yannah; como personas que entrarán al Yahannam, como aquellos que no tienen religión y que no podrán ver el bendito rostro de Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam). Los sabios han interpretado estos ahádith en diferentes formas, pero el hecho es que, la advertencia que Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam) dio a quienes faltan a recitar el salawát para él, es tan severa que es difícil de poder soportar. ¿Y por qué no? Después de todo, las bendiciones que esta Ummah ha recibido a través de Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam), son tales que ningún pensamiento o palabra serían capaces de describir.
 Sus favores hacia nosotros son de hecho tan grandes que con justa razón ha de advertirnos. Por el contrario, los beneficios por recitar las salutaciones hacia nuestro Profeta Muhammad (sallalláhu 'aleihi wa sallam), son tan inmensos que sería un verdadero error el privarnos de ellos. El hadith nos enseña que, quienquiera que recite un salawát (salutación) para Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam), Alláh Ta'álá le enviará diez misericordias para él, los ángeles suplicarán por él, sus pecados serán perdonados, su rango será elevado, recibirá una recompensa mayor que el monte de `Uhud, y Rasúlulláh (sallalláhu `aleihi wa sallam) intercederá por él en el Día del Qiyámah. Además otras recompensas prometidas son: Ganar la Complacencia y la Misericordia de Alláh Ta'álá, ser protegido de Su ira, ser liberado de los tormentos del Qiyámah, y ver el lugar que le aguarda en el Paraíso aún mientras se está aquí en la tierra. También hay recompensa por recitar el salawát 'alán-Nabi (salutaciones), cierta cantidad de veces, junto con la promesa de nunca ser afectado por la pobreza o la necesidad, la promesa de estar cerca de Rasúlulláh (sallalláhu ‘aleihi wa sallam) en la corte de Alláh Ta'álá, la promesa de ser protegido frente a los enemigos, de limpiar nuestro corazón de la hipocresía y de las enfermedades espirituales y también de obtener el amor de los demás.
 Muchas bienaventuranzas más han sido enumeradas por la recitación abundante de las salutaciones. Los sabios han dicho que es fard recitar estas salutaciones aunque sólo sea una vez en la vida, mientras que es wáyib (obligatorio) hacerlo cada vez que se menciona el nombre del Profeta Muhammad (sallalláhu `aleihi wa sallam). Otros dicen que es mustahab (recomendable).
 La tercera persona es aquella que, mientras estuvo con vida, vio que uno o sus dos padres alcanzaron la vejez, y no fue capaz de alcanzar el Paraíso sirviéndoles. Esto ha sido explicado en varios ahádith, los 'ulamá han dicho que es obligatorio obedecer a los padres en cualquier acto que sea permitido hacer. No se puede ser irrespetuoso y desobedecer a nuestros padres aunque estos no sean creyentes, ni debiéramos levantar nuestra voz en frente de ellos, ni llamarles por su nombre.
 A los padres se les debe dar la preferencia en todo antes que nosotros (por ejemplo; comer, beber, caminar o sentarse, entre otras), cuando les invitamos hacia el bien y les prohibimos de cometer malas acciones, lo haremos con delicadeza. Si ellos no aceptan, aun así, debemos de honrarles y respetarles, y debemos hacer du'á para que ellos reciban la Guía. En un hadith se ha dicho que la mejor de las puertas para entrar al Paraíso es el padre, si deseas puedes cuidarla o puedes destruirla. Un sahábi preguntó a Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam) ¿Cuáles son los derechos de los padres? Él (sallalláhu 'aleihi wa sallam) respondió: "Ellos son tu Yannah y tu Yahannam." Su felicidad es el Yannah y su tristeza es el Yahannam. Además, se ha dicho en un hadith que cuando un hijo obediente mira con amor y devoción a sus padres, la recompensa por esa mirada será la aceptación de Alláh. En otro hadith se ha dicho que fuera de asociar a otros dioses con Alláh Ta'álá, Él perdona todo lo que Él desea. Sin embargo, Él comienza a castigar la desobediencia a los padres aún antes de la muerte. Un sahábi dijo: "¡Oh Mensajero de Alláh! quisiera ir al yihád." Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam) le preguntó: "¿Tu madre vive aún?" Él respondió que Sí. Rasúlulláh (sallalláhu 'aleihi wa sallam) dijo: "Sírvela, pues el Yannah se encuentra para ti, bajo sus pies."
 En otro hadith se narra que la complacencia de Alláh Ta'álá se encuentra en la complacencia del padre y que el desagrado de Alláh Ta`álá se encuentra en el desagrado de nuestro padre. En varios otros ahádith se ha señalado la importancia y las virtudes de servir a nuestros padres ancianos.
 No debemos deducir, desde lo que hemos leído en este hadith, que si no cumplimos con tratar servicialmente a nuestros padres, mientras ellos estuvieron vivos, no podremos salvarnos de ir a Yahannam. En la shari`ah existe la salida, el hadith nos enseña que debemos hacer du'á e istigfár por ellos, de este modo podremos ser considerados entre quienes fueron obedientes con los padres. Otro hadith establece que la mejor obra que podemos hacer después de la muerte de nuestro padre, es tratar a sus amigos y compañeros en la misma forma en que éste lo habría hecho.

jueves, 5 de enero de 2012

Auto justificarse de los susurros del Shaitan


 Algunos de los tipos de auto justificación más comunes son:

Al menos soy mejor que otros
Cuando tienen relaciones haram con miembros del sexo opuesto dicen "al menos mi intención es el matrimonio." Cuando firman contratos haram dicen "pero yo no robo”. Si no rezan las oraciones que son obligatorias dicen” pero si rezo los viernes”. Homosexualidad, drogas, alcohol, relaciones prematrimoniales, adulterio, etc. Son todas acciones Haram que llevan al Infierno.

Ya cambiare mas adelante
Muy común entre los jóvenes. Piensan que cambiaran cuando sean mas mayores, se casaran, irán al Hajj, besaran la piedra negra y empezaran a practicar Islam. Esta excusa les permite justificar todo el Haram que cometen.

No estoy preparado todavía, cambiar es muy difícil
La verdad oculta detrás de esta justificación es que esa gente no quiere dejar de cometer la acción o acciones Haram que hacen. Muchos pasan muchísimo tiempo en el gimnasio, o haciendo algún deporte, o jugando a los videojuegos, pero cuando se trata de practicar el Islam son vagos…

Si soy puro por dentro Allah me perdonara
El hecho de que alguien piense esto prueba que no están puros ya que pensar así es un hecho contrario a lo que el Islam nos enseña. Ser "puro por dentro” no solo significa creer en el Islam sino practicarlo.

Auto justificarse conlleva vivir como animales, aunque por dentro saben que el camino que llevan es incorrecto. Incluso después de fiestas, relaciones, drogas, música y alcohol se sienten descontentos y este sentimiento no desaparece fácilmente, algunos aprender a vivir con el mientras que otros deciden usar el cerebro y empiezan a pensar en el Islam, la única forma de pensar y de vivir que proporciona tranquilidad.


martes, 3 de enero de 2012

Dos Ángeles


"Dos Ángeles registran sus obras, uno a la izquierda y otro a la derecha." Corán 50:17.
 Los ángeles son una creación del mundo oculto, creados por Allah –Majestuoso y Poderoso- de luz.
Ellos son siervos de Allah y no Lo desobedecen en lo que les ordena, no poseen cualidades de señorío o divinidad, son una gran cantidad, muchísimos y su número solamente lo conoce Allah.
El hombre tiene custodios por delante y por detrás, que lo protegen por orden de Allah. Sabed que Allah no cambia las gracias que concedió a un pueblo, mientras ellos no cambien lo que hay en sí mismos. Y si Allah decreta el mal para un pueblo, no existe nada que lo pueda impedir, y no tendrán fuera de Él protector alguno. (Corán 13:11)
Los ángeles guardianes protegen al hombre de las fieras, los bichos y cosas perniciosas por deferencia de Allah con él, y si llega el decreto no hay remedio posible. De Abu Miylaz se transmitió que acudió un hombre de la tribu de Murad a ‘Ali y le dijo: ¡Guárdate! Pues hay gente de la tribu de Murad que quieren matarte; y dijo:
Ciertamente, con cada hombre hay dos ángeles que lo protegen mientras que no haya llegado el decreto, pero, si éste llega, los ángeles lo dejan a solas con el decreto de Allah.”
Añadió Al-Hasan que la protección del hombre es por mandato de Allah y no por ellos mismos, y también se ha dicho que lo protege de los ángeles del castigo, porque Allah no cambia la salud y las gracias que otorga a un pueblo hasta que su gente cambia lo que hay en ellos mismos con la incredulidad; y si persisten en ella les llegan, por orden de Allah, los ángeles del castigo con toda clase de pruebas y calamidades.
Dijo Kinana al-Adawi: entró ‘Utman a ver al Profeta (sws) y le dijo: ¡Oh Mensajero de Allah! ¡Infórmame de cuántos ángeles hay con cada siervo! Dijo:
Hay un ángel a su derecha que escribe las buenas acciones y otro a la izquierda que escribe las malas; el que hay a la derecha es el emir sobre el que hay a la izquierda, pues si el hombre hace una buena acción se le apunta como diez, y si hace una mala, le dice el que está a la izquierda al que está a la derecha: ¿se la anoto? Dice: ¡No!, tal vez pida perdón a Allah, el Altísimo, o se arrepienta a Él; y si lo dice tres veces, le dice, sí, escribe, y que Allah nos libre de ello”.
Y dos ángeles delante y detrás de ti, dirá Allah, el Altísimo: “El hombre tiene custodios por delante y por detrás, que lo protegen por orden de Allah.”: habrá un ángel agarrándote por tu flequillo, si te humillas sometido a Allah, te elevará y si te vuelves soberbio contra Él, te asestará un golpe mortal; habrá dos ángeles sobre tus labios, no te protegerán si no es pidiendo bendiciones para Muhammad y su familia, y un ángel de pie en tu boca no dejará que entre en ella la serpiente,  y habrá dos ángeles sobre tus ojos; pues, esos son diez ángeles que habrá con cada uno, y además se alternarán los ángeles de la noche con lo ángeles del día, siendo en total veinte ángeles para cada uno; e Iblis estará con el hijo de Adam por el día y su hijo por la noche”.
La fe en los ángeles consiste en:
1.- La fe en su existencia.
2.- La fe en aquellos ángeles de quienes sabemos sus nombres (por la revelación) como Yibrîl o Israfîl (que la paz sea con ellos) La fe en aquellos cuyos nombres ignoramos, creemos en ellos en general.
3.- La fe en sus cualidades, dice el Altísimo en el Corán:
"Alabado sea Allah, Originador de los cielos y la Tierra, dispuso que los Ángeles fuesen Sus enviados [para transmitir Sus órdenes a los hombres], algunos dotados de dos alas, otros con tres o cuatro; aumenta en la creación [y poder] a quien Le place." Corán 35:1.
 El Profeta (que la paz y la misericordia de Allah sean con él) vió a Yibrîl en la forma original que fue creado, los ángeles tienen la capacidad de tomar diferentes formas, encontramos que llegaron con Abraham y Lot en la forma de seres humanos, y Yibrîl acostumbraba ir con Muhammad en diferentes formas.
 4.- La fe en las obras y acciones que aprendimos de la revelación como la glorificación que hacen hacia Allah y la adoración. Dice el Altísimo:
 "A Él pertenece cuanto existe en los cielos y la Tierra; y quienes están junto a Él [los Ángeles] no se ensoberbecen de Su adoración, y no se cansan de hacerlo.. Le glorifican noche y día, ininterrumpidamente, y no se agotan por ello." Corán 19:20-21.
 Algunos ángeles realizan acciones específicas como es el caso de Yibrîl , encargado de la revelación, Israfîl es quien soplará la trompeta para la hora del levantamiento, Mikâ`îl el encargado de la lluvia y la vegetación, Ridûân el vigilante del paraíso, Mâlik el vigilante del infierno, así como los que cargan el trono y los custodios, dice Allah:
"El hombre tiene [Ángeles] custodios por delante y por detrás, que lo protegen por orden de Allah." Corán 13:11.
 Y los encargados de registrar las obras:
 "Dos Ángeles registran sus obras, uno a la izquierda y otro a la derecha." Corán 50:17.
 Frutos de la creencia en los ángeles
La apreciación de la grandeza y el gran poder de Allah –Majestuoso Poderoso-, ya que si en la creación hay muestras de grandeza, la grandeza del Creador es mucho mayor.
El agradecimiento a Allah, por cuidar de los hijos de Adán por poner ángeles a su protección y escribir sus obras.
El amor a los ángeles, ya que ellos son siervos de Allah y tienen una prodigiosa adoración.
La paciencia en la obediencia y la tranquilidad alcanzada por saber el musulmán el estado de los ángeles y el estado de su obediencia ante Allah.
La sensación de descanso y amigabilidad en la soledad al saber que Allah ha hecho custodios y protectores a los ángeles.

domingo, 1 de enero de 2012

Historia de un mercenario que quería matar al Profeta(sws)


Había un mercenario de la Meca que habían contratado los Quraish con la intención de matar al profeta sws, el cual había preparado veneno en su espada, con la intención de dar solo un golpe y acabar con él, pero las noticias llegaron rápidamente a Medina, y cuando este mercenario llego a las afueras de medina, fue detenido por los compañeros del profeta sws; lo detuvieron lo amarraron y esperaron a la llegada del profeta sws.
Cuando llego el profeta sws le informaron de lo sucedido, y fue donde el detenido estaba, y al verlo en pleno sol y amarrado. El profeta sws les dijo a sus compañeros: ¿Le habéis dado de comer? ¿Le habéis dado de beber? ¿Por qué lo habéis puesto en el sol? ¿Por qué lo habéis amarado? , el profeta sws informó a sus compañeros que aunque esté detenido tiene sus derechos. Entonces les dijo que lo soltasen, le dieron de comer y de beber, y cuando acabase el profeta sws iba a hablar con él.
El profeta sws después de comer y beber el mercenario, empezó a hablar con él y a preguntarle que porque quería matarle. El mercenario le explicó que lo habían contratado para matarlo porque había dividido a familias, había puesto enfrentados a padres e hijos, y que rehusaba de los 360 ídolos de meca por uno solo dios. Y el profeta sws le explicó que Allah lo eligió como profeta, y su misión era transmitir el mensaje y empezó a explicarle lo que decía el Islam, y estuvo largo tiempo explicándole las cosas y mandamientos del Islam.
Este mercenario ya se había dado cuenta del buen gesto y de la gran amabilidad del profeta, cuando todos querían matarle, el profeta sws lo primero que hijo es preguntar si le habían dado de comer y beber, y en que otras circunstancias ya lo habían matado. Estos actos juntos con los que le había demostrado el profeta sws todo el tiempo que estuvo hablando con el, al final el profeta sws le invitó a abrazar el Islam, y si no quería lo iba a dejar libre, con la condición de no enfrentarse mas a los musulmanes, y que antes no sabía que decía el Islam y que ahora ya sabes lo que dice.
Y le invitaba a no luchar mas contra el Islam, a lo que el mercenario aceptó. Este mercenario ya le estaba entrando un poco de fe en su corazón, pero quería comprobar algo*.
El mercenario le dijo al profeta sws que no quería hacerse musulmán, que quería seguir siendo lo que es. Así que lo dejó libre. Y todos los compañeros del profeta sws le dijeron que porque lo había dejado libre, que no se merecía dejarlo libre ya que quería matarlo. Pero les dijo el profeta sws que el mercenario no sabía y ahora sabe quien soy. Así que lo dejó libre y se marcho de Medina.
Y pasados unos cuantos kilómetros, este mercenario volvió a medina porque había comprobado lo que quería ver* que fue que diciendo que no aceptaba ser musulmán y aun así lo habían dejado libre, y siendo libre para irse o volver, y fue esto era lo que quería comprobar.
Así que al rato volvió a Medina, y todos los musulmanes se sorprendieron y le dijeron que para qué había vuelto; toda medina se había levantado. Y cuando todos estuvieron allí, levantó el dedo e hizo la Shahada, atestiguó que solo había un Dios Allah y que el Profeta sws es el Mensajero de Allah.
Entonces todos aquellos que antes lo habían detenido y no le habían dado de comer ni de beber y que deseaban matarlo, se volvieron hacía él contentos y encantados porque había aceptado ser musulmán. Pero uno de los ansar de Medina, le preguntó que porque si ya había creído en el profeta sws por qué no hizo la Shahada antes y por qué esperó hasta volver aquí para reconocerse musulmán..
Le dijo que quería comprobar una cosa, quería comprobar y demostraros que quería ser musulmán siendo LIBRE, y que si hubiese elegido ser musulmán en Medina, se me hubiera considerado que me hice musulmán por miedo a no morir, y que siendo libre de volver a la Mekka, y de seguir siendo lo que soy, estando libre decidí sin coacciones de ningún tipo ser musulmán, y ahora todos me considerareis que me hice musulmán por voluntad propia, porque tuve la elección de volver a la meca , pero decidí volver a Medina para hacerme musulmán, porque lo que me demostró vuestro profeta sws, con su humildad educación saber estar, nobleza, todo esto que vi en vuestro profeta sws fue lo que me hizo aceptar el Islam, y ahora gracias a Allah y al Profeta sws ahora soy musulmán In sha Allah. Cuando llegaron las noticias al Profeta sws se alegró, porque otra persona más se había hecho musulmana gracias a Allah.
Esta historia verídica, fue como se hizo musulmán un mercenario que tenía la intención de matar al profeta sws con su espada rociada previamente de veneno, la actitud de los suhabas con el mercenario dejó mucho que desear, pero fue la actitud del profeta sws y su educación y su buen carácter, fue lo que le hizo al mercenario ver que el profeta sws era una persona totalmente diferente al resto, y cuando le explicó y le dio las pruebas evidentes que era el profeta sws, le dio a elegir o volver a meca siendo libre o hacerse musulmán, y todos estas acciones hicieron que su corazón se ennobleciera y entendiera que lo que le decía el profeta sws era la pura verdad y que todo lo que había visto era el proceder de un gran hombre. Y que si estuviera en otras circunstancias ya lo habían matado sin darle ni comer ni beber y menos conversar con el dejándolo libre.
Así que todas estas cosas y la dialéctica del profeta sws hicieron que el corazón del mercenario aceptase ser musulmán y gracias al carácter del profeta sws y su educación se hizo musulmán.
Todo musulmán debe tomar nota de esta historia, en esta historia lo que premia fue el proceder y la educación del profeta sws en el trato con el mercenario, muchas veces se hace mejor la dawa (predicación) dando uno ejemplo con un buen proceder y una buena educación que hablando y transmitiendo un montón de mandamientos.
Este mercenario se hizo musulmán porque vio con sus ojos, y experimentó con su cuerpo, no sólo vio palabras sino que vio acción y de la buena. Así que os animo a que seamos rectos educados y tengamos buen carácter con todo el mundo ya sean musulmanes o de otra confesión, porque al ser educados y al tener buen carácter también se está predicando el islam y es la mejor forma de predicar es con el ejemplo como hizo el profeta sws; como paso con el mercenario de la anterior historia.
Todas las historias que pasaron nos sirven de ejemplo para la gente de conocimiento. El profeta sws dijo que en la balanza del día del Juicio Final no hay nada que pese más que el buen Carácter y la Buena Educación. Y los que estarán más cerca del Profeta sws en el paraíso son los que Mejor carácter tengan y Educación. Y el mejor de los musulmanes es el que mejor Carácter y Educación y comportamiento tenga con su esposa.
Oh Allah haznos de los que Tengan buen carácter y buena educación (husni al juluk) AMIN